En algunas ocasiones, la capacidad para aprender no está adecuadamente desarrollada. Entre las causas más frecuentes, puede existir una débil habilidad sensorial que incluso aún en un grado pequeño, afecta mucho al aprendizaje, estrategias ineficaces para pensar, razonar, transferir los aprendizajes, o bien desmotivación y malas experiencias de aprendizaje, cuando las emociones bloquean y los demás no creen en nosotros o no nos entienden...
Cómo nos engañan nuestras percepciones y cómo activamos nuestra atención selectiva:
Te proponemos realizar una completa EVALUACIÓN PSICOPEDAGÓGICA y realizar un programa de estimulación que incluirá actividades en los 3 ámbitos del aprendizaje:
1.- "Poder" : terapias que mejoran las habilidades visuales, que posibilitan un mayor control corporal y un mejor desarrollo motor y que integran las sensaciones sensoriomotoras en nuestro cerebro.
2.- "Querer" : una mirada al mundo de las emociones, la autoestima, la motivación y el apoyo desde la familia y con uno mismo/a.
3.- "Saber" : utilizando métodos novedosos adaptados al estilo de aprendizaje de cada persona y su etapa evolutiva.
Para saber si precisas una evaluación, puedes empezar identificando los siguientes "síntomas" en otras personas o en ti mismo…
Son síntomas de niños y niñas, jóvenes o adultos que no pueden aprender aunque quieran: “funcionan de forma involuntaria” y mientras no se consiga un funcionamiento cerebral voluntario, unas habilidades sensoriomotoras funcionalmente adecuadas, no podrá aprender de forma fácil y voluntaria.
Miramos de forma especial, el déficit de atención, la hiperactividad y la dislexia que “etiquetan” y aíslan en la actual práctica educativa a muchos niños/as.
Realmente el éxito de nuestros programas es poder aportar más pistas al propio conocimiento y reflexión, pues desde nuestra experiencia es como construimos los conocimientos que aprendemos y enseñamos. Y los padres, madres y tutores, presentes en el día a día, tienen un papel fundamental en el desarrollo óptimo de nuestros programas.
El reto del educador, del maestro, del padre, madre, tutor, monitor, profesor, terapeuta… es poder mirar de forma global y personalizada a cada niño/a, realizar actividades de estimulación, atender a las carencias o posibilidades de cada niño/a en particular para llevarle a su máximo potencial.
Si es necesario, el programa tendrá que incluir actividades de estimulación para minimizar sus dificultades trabajando más intensamente en los aspectos que precisen mejora. Y ese reto de preparar para el aprendizaje a cada niño y niña, solo se cumple, cuando miramos con mente abierta, con el corazón y nos arriesgamos con la intención de hacer nuestro trabajo con amor.
En Preparados para aprender, nuestra misión es facilitar las capacidades físicas y las habilidades, las experiencias, la motivación y la alegría por aprender a lo largo de toda la vida en personas de cualquier edad.
Aprender será más fácil, aprenderás más y mejor.
Aprender mientras juegas y jugar mientras aprendes.