De la misma forma que la cultura de un pueblo contempla su lenguaje, leyes y normas, historia, literatura, etc.. en una institución existe un lenguaje propio, unas leyes y normas, una historia y una literatura propia… y un sistema de relaciones propio entre sus miembros. Esta síntesis es la cultura de quienes forman parte de la organización, los que estuvieron y los que están. Esa cultura propia, ese sistema de relaciones, la distingue, la identifica, y orienta su accionar y modos de hacer, rige sus percepciones y la imagen que se tiene de ella.
Cada sistema desarrolla su propio patrón de comportamiento y rutina (cómo se hacen las cosas por aquí) y esto es lo que se denomina la cultura de la institución. Las personas nuevas, que entran en el sistema, toman conciencia de ello de una forma inconsciente y siempre hay miembros del grupo que les recuerdan ese comportamiento confiando que sea seguido y adoptado. A medida que seguimos la cultura de la empresa, nos sentimos más relajados (esto es, inocentes) y como en “casa”.
Aunque se intente promocionar una cultura compartida por toda la organización, ocurre, a veces, que la cultura de los departamentos es más fuerte, o que se originan subculturas generacionales, o estilos de liderazgo y gestión contradictorios,… etc. Esto origina tensiones muy frecuentes y pueden ser muy difíciles de superar.
Todos pertenecemos a muchos sistemas. Es normal experimentar tensiones que son provocadas cuando las necesidades de un sistema son incompatibles con las necesidades de otro. Por ejemplo, supongamos que el mismo día quiero ir a la fiesta de Navidad e ir a ver a mis hijos jugar al fútbol en el colegio. Es imposible estar en los dos sitios a la vez, por lo cual me sentiré culpable o incómodo en relación al sistema que “decepciono”.
Como pertenecemos a varios y diferentes sistemas, malentendidos y conflictos entre las diversas culturas pueden surgir muy fácilmente. En muchos casos, esos conflictos son relativamente pequeños y se resuelven instintivamente dentro del sistema (una especie de proceso continuo de auto-cura o auto-nivelación). Pero, en otras ocasiones, esto no ocurre y, entonces, es necesario intervenir.
Los Principios Sistémicos que proponemos tener presentes son:
Estos Principios Sistémicos son “leyes” o “reglas” generales que facilitan el funcionamiento de los sistemas. Los sistemas funcionan con más armonía y equilibrio. Por lo general se observa que aparece una sensación de que “todo está en su lugar”. Se puede funcionar obviándolos o incluso actuando de forma contraria, pero el sistema u organización se resiente cuando no se tienen en cuenta principios que se han observado como importantes.
Algunas de las preguntas que tendremos que resolver serían:
Vemos, la definición de los conceptos básicos que incluimos.
Cultura se define como: el conjunto de todas las formas y expresiones de una sociedad determinada. Como tal incluye costumbres, prácticas, códigos, normas y reglas de la manera de ser, vestimenta, religión, rituales, normas de comportamiento y sistemas de creencias.
La UNESCO, en 1982, en la Declaración de México, habla de CULTURA en los siguientes términos “... la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones. A través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestión sus propias realizaciones, busca incansablemente nuevas significaciones, y crea obras que lo trascienden.”
Un sistema es un conjunto de "elementos" relacionados entre sí, de forma tal que un cambio en un elemento afecta al conjunto de todos ellos. Para estudiar un sistema hemos de conocer los elementos que lo forman y las relaciones de cambio que existen entre ellos.
Una organización es un sistema cuya estructura está diseñada para que los recursos humanos, financieros, físicos, de información y otros, de forma coordinada, ordenada y regulada por un conjunto de normas, logren determinados fines.
En síntesis: Estos 3 conceptos se interrelacionan de forma dinámica, como dinámica es la propuesta de trabajo para hacer que la cultura propia de la organización esté alineada con los sistemas que integran la organización, sus valores y acciones encaminados al cumplimiento de la misión institucional