Terapia Visual
La terapia visual comportamental no sólo modifica la forma en la que los ojos trabajan, sino la forma en la que trabajan todos los sentidos conjunta y coordinadamente y cómo se procesan esas informaciones en el cerebro.
Los ejercicios se realizan con materiales muy variados,
integramos en la terapia visual ejercicios de integración cerebral y PNL. Además, se establecen actividades de
coordinación multisensorial como ejercicios auditivos y motores. De esta forma, la terapia visual se convierte en una herramienta muy potente de estimulación en nuestros programas.
Evolución de la Visión
En un recién nacido el sistema visual “está” en potencia, existe una pre-organización cerebral que tiene que desarrollarse en las experiencias con el entorno. Cuando el niño o niña tiene 3 o 4 años e inicia su escolaridad, se aprecia su agudeza visual, su capacidad de ver de forma nítida en cerca y lejos, y cuando no puede se habla de miopía, hipermetropía o astigmatismo. Pero otras habilidades visuales se deben desarrollar para las actividades “de cerca” y la coordinación motora.
Estas habilidades le permiten seguir objetos en movimiento, Cuando un niño desarrolla las diferentes habilidades del sistema visual también mejora su rendimiento al correr, saltar, sortear obstáculos, evitar irregularidades del terreno, montar en bicicleta... las buenas habilidades motoras estimulan a su vez las habilidades visuales. Y por el contrario los niños “torpes”, que tropiezan con facilidad, “no les gusta” hacer deporte, que les cuesta montar en bicicleta... tienen en muchos casos bajas habilidades visuales. Esas dificultades manifestadas en “lo motor” tienen en realidad mucha relación con la visión.
La visión se compone de
habilidades visuales fisiológicas, que dependen principalmente del estado del sistema visual, y de
habilidades perceptivas que dan significado a las sensaciones visuales. Necesitamos desarrollar ambas habilidades para que la VISIÓN, presente en muchisimas áreas del cerebro, tenga significado, coherencia y nos permita aprender fácilmente.
Entre las habilidades visuales fisiológicas que valoran los
ópticos optometristas comportamentales encontramos las siguientes:
-
Movilidad ocular: Incluye las habilidades para seguir objetos en movimiento lineal (horizontal y vertical) o de un punto a otro con los ojos de forma precisa y dirigir perfectamente los ojos donde nosotros queramos de forma rápida y precisa. Imprescindible para la lectura y los deportes.
-
Cambio de Foco - Acomodación: La habilidad de mirar rápidamente de lejos a cerca o viceversa, con nitidez y precisión. Por ejemplo, cuando miramos de la pizarra al libro o viceversa, o de los mandos del coche a la carretera.
-
Enfoque mantenido en el tiempo - Atención Visual: La habilidad de poder mantener el enfoque en visión cercana de una forma cómoda y eficaz durante un tiempo determinado.
-
Percepción de Profundidad: La habilidad de determinar las distancias entre objetos y de ver el movimiento preciso en el espacio tridimensional.
-
Visión Periférica: La habilidad de registrar e interpretar lo que está sucediendo alrededor mientras se está atendiendo a una tarea visual central específica.
-
Binocularidad: La habilidad de usar ambos ojos simultáneamente, con suavidad, igualdad y precisión.
Si es necesario, te remitimos a un óptico optometrista comportamental para completar la terapia visual. Puedes consultar el más cercano aquí.
Entre las habilidades perceptivas que evaluamos se encuentran las siguientes:
Memoria Visual: La habilidad de formar imágenes mentales, retenerlas y almacenarlas para un uso futuro, o para síntesis de nuevas imágenes mentales.
-
Discriminación visual: La habilidad de determinar diferencias entre objetos semejantes y atender a las semajanzas y las diferencias.
-
Constancia de forma: La habilidad de integrar la forma de un objeto y las variaciones que puede registrar como un mismo objeto.
-
Figura - Fondo: La habilidad de discriminar la figura principal en variados contextos percibiendo claramente las diferencias y distancias.
-
Cierre visual: La habilidad de previsión de la figura de un objeto del que solo se observa una parte de él.
Integración visuomotora: La habilidad de integrar la información de la ruta visual con la motora a través de su expresión en el dibujo, la escritura, etc...
En "Preparados para aprender" estimulamos todas estas habilidades para tener una visión completa y adecuada en cerca, lejos, y en diferentes contextos y circunstancias.
La
Terapia Visual puede reeducar el sistema visual para que vuelva a tener unas buenas bases visuales o para instaurarlas desde el principio en el caso de no haberlas tenido antes. Enseña a la persona a usar su visión de la forma más óptima para conseguir la mayor calidad y rendimiento en sus tareas visuales cotidianas.
La terapia visual consigue establecer nuevas conexiones o nuevos esquemas neuronales, que permiten a la persona recibir, procesar, filtrar y comprender mejor la información visual que recibe. Con ello, mejora sus habilidades visuales, las actividades de coordinación ojo-mano como la escritura, el desplazamiento por el espacio, los deportes,...
Entre los materiales utilizados están las lentes, pelotas, “cartas” de letras, números y símbolos, láminas de colores, parches, láminas transparentes, juegos, programas de ordenador, elementos de equilibrio, metrónomo y una amplia variedad… lo importante es tener el objetivo claro de qué habilidad estamos trabajando. Se realizan en situaciones diferentes para que la persona adquiera y practique las habilidades visuales en tareas de su vida cotidiana.